Annapurna, PUNTO Y SEGUIDO.

24 de abril de 2010
Katmandú

Amigos y amigas todo tiene un final, y el final de nuestra expedición desgraciadamente ha llegado, aunque nos haya costado tomar esta decisión más que nunca. Los dolores espalda me siguen molestando todo y tomando la medicación, pero lo que realmente me duele más es saber que los compañeros de expedición, en Juanito Oiarzabal, Carlos Pauner y compañía ha salido hacia la cima y que un servidor, se quedará sin cumbre esta vez o por lo menos, sin haberlo podido intentar. Por otra parte me tranquiliza saber que pronto podré estar con los míos y que esta expedición habrá finalizado y con ella el sufrimiento de estos siete días esperando una mejora, que finalmente no aparecido.

Esta misma mañana, con Lluís hemos hecho una llamada a la aseguradora para dar parte del accidente. Las cosas inusualmente se han desarrollado de tal manera que mientras escribía este correo, hemos recibido la llamada del corresponsal de Nepal, diciéndonos que inmediatamente seríamos evacuados. No nos lo podíamos creer, en breve un helicóptero nos venía a recoger para llevarnos a Katmandú. No habíamos desayunado, no teníamos el material preparado .. teníamos que tomar una decisión teniendo un depósito de material al Campo 1, el Campo 2 todo montado y el Campo 3 equipado, si nos íbamos perdíamos el material si es que no enviábamos alguien a recogerlo lo, a cambio pero, estábamos a cuarenta y cinco minutos de Katmandú y del hospital.
A las 13h y 45min, éramos evacuados con un B3, un helicóptero que hace unos años consiguió poner un patín cima del Everest. Con Luis nos preguntábamos como una "mega-máquina" como esta nos venía a recoger, durante el vuelo nos lo aclararon: El tiempo seguía inestable, como cada día, el cielo estaba tapado y con él la cima del Annapurna. Durante el trayecto y siguiendo el curso del Miristikola hasta el valle del Kaligandaki en dirección a Katmandú, las turbulencias eran constantes y no las teníamos todas, y por eso, el porqué de este helicóptero.
Hemos llegado al aeropuerto de Katmandú y desde aquí, directamente al hospital donde nos han hecho una revisión completa a los dos. Después de mirar los médicos las radiografías, han llegado a la conclusión de que lo que tenemos son fuertes contusiones, sin descartar que podamos tener pequeñas fisuras o alguna otra lesión y que esto debería mirar con ecografías que aquí no las pueden hacer. Es por eso que me envían rápidamente a Barcelona donde espero que la hagan y así conocer el alcance de las lesiones. Me gustaría agradecer con la velocidad y seriedad en la que me sido evacuados, gracias al seguro de la FEEC.
Me llevo una satisfacción mayor a la de los demás cumbres, como los últimos, el Lhotse, el Everest, el Cho Oyu ... sobrevivir a una avalancha de nieve, bloques de hielo y piedras sobre los 6.500mal 'Annapurna es infinitamente más satisfactorio que cuando he hecho cima otras veces, soy de los que pienso que siempre hay que quedarse con la parte positiva de las cosas. El Annapurna (madre de la abundancia con sánscrito) no nos ha dado permiso, la avalancha ha sido su aviso o al menos lo tengo que entender así, y como bien dice mi amigo Ramón: "... habrá otros Annapurnas que recoger ...", en referencia al ramo de Rododendros del día de Sant Jordi.
Así pues os espero la próxima temporada, a principios de septiembre donde intentaré subir a otro ocho mil: el Manaslú de 8.163m.
Ahora me queda dar las gracias a todos los patrocinadores que han hecho posible esta expedición, esperando me acompañen en la cima del Manaslú el próximo otoño. A la Secretaría General del Deporte, Vèrtic, Infinit Emotions, ISM, Temps d'Aventura de TV3 y la colaboración del Club Excursionista de Gràcia y el Grupo Excursionista Gelade del Avenç de Esplugues. También animar a todos aquellos y aquellas que se quieran sumar como patrocinadores y colaboradores. Por último quisiera agradecer todo vuestro apoyo incondicional, tanto el de la familia como el de los amigos y amigas y conocidos desde Argentina, Madrid, Segovia, Bilbao, Córdoba, Málaga, Mallorca, Barcelona, Girona, Lleida, Tarragona ... y sobre todo el de toda la gente que hay detrás del proyecto Catalunya 14x8000.

Un abrazo para todos,
Xavi Arias